Hola Lidia,
En una gestación sin complicaciones no existen ningún riesgo por bañarse en la playa o en la piscina durante el tercer trimestre. De hecho, la sensación de ingravidez que proporciona el estar sumergido en el agua ayuda a sentirse mas ligera y a aliviar las molestias que puedan existir en la espalda debido a los cambios posturales.
Un saludo