En el caso de las embarazadas la recomendación actual es no utilizar las vacunas hasta tener datos acerca de su seguridad. No obstante, debido a la composición de las vacunas mRNA que ya se están utilizando y las de adenovirus en curso de aprobación, y debido a que ninguna de las dos contiene componente de virus vivos, la mayoría de sociedades científicas y la OMS consideran que se podrían utilizar en gestantes con enfermedades cardiopulmonares, renales, pacientes trasplantadas, oncológicas, inmunosupresión y trabajadoras de salud.
En caso de vacunación, es de preferencia a partir del segundo trimestre. Así pues, si tomas la decisión de vacunarte, te recomendaría hacerlo a partir del segundo trimestre.