Estimada doctora:
Me gustaría comentar mi caso, ya que estoy bastante preocupada.
Hace dos años tuve un bebé prematuro. Nació en la semana 27 y pesó 895 gramos. Estuvo dos meses ingresado en neonatos, dos meses que lo pasamos muy mal, aunque él evolucionó bien, ni siquiera hubo que intubarlo, supongo que por la inyección para la maduración de los pulmones. Después... Bueno. Ha sido duro, muchos miedos a que hubiera secuelas, muchas pruebas y revisiones médicas... Podemos sentirnos afortunados, ya que está muy bien, aunque su desarrollo va lento, está inmaduro, y van a valorar también una posible hiperactividad y déficit de atención.
El tema en cuestión es que tras mucho pensarlo nos decidimos a buscar un hermanito. Estoy de 17 semanas y aunque de momento el embarazo va muy bien, yo cada semana que pasa estoy peor, con mucho miedo a que ocurra lo de la otra vez. Voy cogiendo cariño al pequeñín y se acercan las semanas peligrosas... Hasta me han mandado valium, pero he dejado de tomarlo porque he visto que no es seguro para el feto.
Lo que me hace estar así es que no sé lo que pasó la otra vez, por lo que ahora no se puede hacer mucho. Estoy en alto riesgo, aunque de momento sólo me han visto una vez allí, pero también voy a una clínica privada.
La otra vez empecé con problemas en la 20. Me dolía una barbaridad la parte baja del vientre y al final de la espalda. Después de dar a luz.. Yo creo que ese dolor eran contracciones pero en su día no lo sabía. Comencé a ir a urgencias a menudo. Una vez lo achacaron a una infección de orina, otra a un posible cólico... Ninguna vez vieron nada preocupante. En la 22 me midieron el cuello y era de 27 mm. A casa todas las veces.
En la 27 volví, pensando que sería otra falsa alarma, me hicieron un tacto... Y vi los guantes de la doctora llenos de sangre. El cuello medía 13 y estaba borrado. Me ingresaron y pusieron medicación para frenar las contracciones ( que por cierto, para una que registraban los aparatos, yo había tenido 10, no sé por qué), pero nada se pudo hacer, fue cuestión de horas.
No había infección, no tengo útero bicorne (dijeron que era posible que hubiera sido eso), el cuello parecía normal, así que no sé qué pasó ni por qué estuve con contracciones desde la 20.
Ahora estoy con progesterona. El cuello medía 31 y ahora resulta que se ha alargado a 38. Todo va bien, pero me da miedo llegar a la 20 y que se repita la historia, ya que sé que el que me haya pasado una vez multiplica las posibilidades de que pase otra vez. Ahora estoy más vigilada, es verdad, pero es que no se sabe cuál es el problema, y por lo tanto no sé si se podría actuar a tiempo si vuelve a pasar...
¿Podría darme alguna información nueva con todo esto que le he explicado o decirme algo que me ayude a ver la luz? Sería muy duro volver a pasar lo mismo, y quizás si pasa no tuviéramos tanta suerte.
Muchas gracias.