Hola a tod@s, escribo para contar mi historia, ya que me ayudó muchísimo leer vuestro foro durante el embarazo, y espero estas líneas sirvan de esperanza a alguna mamá que esté pasando por ésta situación.
Tuve mi primer hijo hace casi tres años, el embarazo fue genial, absolutamente normal y el parto fue estupendo a la semana 39, la mejor experiencia de mi vida.
Al año de haber nacido mi hijo, vuelvo a quedarme embarazada, todo iba muy bien y con normalidad, los controles absolutamente normales, hasta la semana 23,4.Una noche, a las 12 empezé con dolores en la parte baja, como cuando tienes retortijones, fuí al baño y tuve una diarrea muy fuerte, seguían los dolores, yo pensando que era un malestar estomacal, nunca hubiera pensado que eran contracciones hasta que me dí cuenta que iban y venia con regularidad,y aumentó enormemente la intensidad. Llamamos a una ambulancia y en los quince minutos que tardaron en venir, pasaron de ser cada cinco a ser cada tres minutos, llegué al hospital a las 3 y enseguida rompí aguas, me trasladaron a otro hospital donde había unidad de neonatologia especializada. Allí siguieron medicándome para retrasar lo mas posible el parto pero fué imposible, a las 11.28 de la mañana nació mi niñita, demasiado pequeña para sobrevivir así que se nos fue. Pongo las horas de lo acontecido, porque fué todo tan rápido y tan repentino que no hubo tiempo de nada. Luego los estudios, a mi, a la placenta, autopsia a mi niña, no encontraron nada, nada de nada, todo estaba bien, ella estaba bien...En fin, que no supieron decirnos que fue lo que provocó el parto prematuro. Vinieron luego meses muy duros, mucha angustia y el enorme dolor que ya nos acompañará de por vida, de haber perdido un hijo, sumado a la ignorancia de la gente que cree que el hecho de que haya sido antes de nacer, resta dolor a la pérdida, nada mas alejado de la cruel realidad.
Decidimos volver a intentarlo, ya que no hubo ninguna causa para que sucediera,(o a pesar de eso)...a los cinco meses de que se fuera mi niña, me quedé embarazada otra vez.
El embarazo empezó con muchos mas controles que lo habitual, medición de cuello uterino cada 15 días, progesterona vaginal a partir de la semana 16 hasta el final, comida muuy sana y muucha tranquilidad, bueno, la que era capaz de tener teniendo en cuenta los nervios porque se repitiese lo mismo, y un equipo médico excepcional, amable y profesional de la seguridad social, que nos atendío en cada momento de maravilla.
A pesar de acudir a urgencias unas mil cien veces( cada vez que sentía algo raro, iba,) solo me encontraron una vez gastroenteritis, El tema es que a partir de la semana 20, sentía la barriga dura como una roca y tenía muchas contracciones, de las de braxton, molestas pero indoloras, pero eran demasiadas, y la barriga duriisima todo el tiempo. Una tarde en la semana 30, a pesar de no tener ningun dolor, si que sentía la barriga por explotar y cuando caminaba peor aún, así que decidí ir a urgencias, créi me harían eco y tacto y nada, para casa tranquila..Pero no fué así, tenía dinámica uterina y el cuello blando de 10mm demasiado coto para 30 semanas, estaba teniendo una amenaza de parto prematuro, así que me dejaron ingresada con maduración , medicación y quietud absoluta. A pesar de que ya no eran las 23 semanas de la otra vez, aún era muy prematura mi niña así que el miedo era enorme. Cinco días en el hospital y a casita en reposo relativo, pero yo lo hice ABSOLUTO, solo me movía al baño, por suerte conté con ayuda de mi madre para cocinarme y cuidar a mi otro peque, ya que yo no me quería mover.
Fueron pasando los días con mucho miedo, una tortura contínua, los meses y llegamos a la semana 37!! Genial!aunque aún había un pequeño asunto por solucionar y es que mi niña estaba de nalgas, así que queriendo evitar la cesárea y con la ilusión de vivir un parto ectópico como el primero, decidimos practicar una "versión externa" para girar a mi niña. Así que en la semana 38 (seguía sumando..jajaj) vuelta al hospital, medicación para relajar útero, música en la sala para relajar mente, y las manos mágicas de la doctora que ; provocándome apenas molestias, sin llegar a ser dolor, logró girar a mi pequeña para que pudiera salir cuando quisiera.
Al día siguiente,habiendo recuperado mi"movilidad" habitual, es decir al apenas abandonar la quietud y tres días después de que me hicieran la versión, mi niña nació, sana, hermosa, gordita, y feliz en la semana 38.3....en un parto natural, rápido y maravilloso.
Sé que me explayé demasiado, pero no quería dejar de contar detalles tanto para si sirve de precaución para alguna, como si sirve de esperanza para muchas.
Puedo decir ahora, que tenemos tres hijos, dos aqúi con nosotros haciéndonos felices, y un angelito que protege a sus hermanos desde el cielo.
Y para terminar, agradezco profundamente al personal de ginecología y obstetricia del Hospital Parc Taulí de Sabadell, por habernos cuidado tanto a mi pequeña y a mi.
Gracias.